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Italia actualiza su código deontológico para periodistas

Por primera vez, incluye principios y normas sobre el uso de la Inteligencia Artificial

[English version]


El uso cada vez más extendido de la Inteligencia Artificial por parte de particulares y empresas no hace sino constatar, tal y como resaltamos de manera constante en ethica.press, la necesidad de hacer una utilización responsable de la misma en todos los ámbitos, pero especialmente, puesto que es la materia que nos ocupa, en la tarea periodística. La Inteligencia Artificial puede ser una herramienta más, un recurso adicional, pero bajo ningún concepto debe sustituir a la indagación, la investigación, la contrastación de fuentes y la búsqueda de información de interés.

No nos cansamos de señalar que queda mucho camino por recorrer, pero no es menos cierto que, poco a poco, se están dando pasos para propiciar ese uso responsable del que hablamos. Si a finales de mayo publicamos que la Federación Panhelénica de Asociaciones de Periodistas había lanzado el primer código ético para regular la IA, ahora nos hacemos eco de la entrada en vigor, a principios de junio, del nuevo código deontológico para periodistas en Italia, que por primera vez incluye principios y normas sobre el uso de la IA en el trabajo periodístico.

El documento no solo actualiza y simplifica las reglas que deben seguir los profesionales del periodismo, sino que las contextualiza en la era digital, haciendo hincapié en la responsabilidad al usar herramientas avanzadas, como es el caso de la IA.

Según explica el periodista italiano Alberto Puliafito en un artículo publicado en The Fix a finales de abril, el nuevo código ahora en vigor introduce un artículo 19 que recoge tres principios claros:

  • Las IA no pueden sustituir al periodismo: el acto periodístico humano es insustituible, por muy avanzada que esté la tecnología.
  • La transparencia es obligatoria: los periodistas deben declarar explícitamente cuándo y cómo se utilizaron las IA, y seguir siendo plenamente responsables de los contenidos.
  • Las obligaciones éticas se mantienen: el uso de IA no exime a nadie de verificar hechos, fuentes o respetar los deberes profesionales

Puliafito ve positivas estas premisas, pero alerta de que “el verdadero desafío radica en cómo se interpretarán estas reglas y por quién”, y añade que ha identificado “varias zonas grises”, entre ellas que el artículo 19 hace recaer la carga por completo en cada periodista. “Las decisiones sobre la integración de la IA, desde la automatización editorial hasta los chatbots de audiencia, las toman los editores y los líderes de las salas de redacción. Sin responsabilidad institucional, esta norma corre el riesgo de convertirse en una trampa disciplinaria para los trabajadores independientes y el personal, y no en un escudo para la integridad periodística”, dice.

Para aclarar algunas de estas dudas, Puliafito entrevista en el mismo artículo a Gianluca Amadori, consejero de la Orden Italiana de Periodistas, cuyas respuestas y reflexiones animamos a leer de forma detenida.


English version

Italy Updates Its Code of Ethics for Journalists

For the first time, it includes principles and rules on the use of Artificial Intelligence

The increasingly widespread use of Artificial Intelligence by individuals and companies only reinforces, as we consistently highlight at ethica.press, the need to use it responsibly in all areas, and particularly, in journalistic work. Artificial Intelligence can be a helpful tool, an additional resource, but under no circumstances should it replace investigation, research, source verification, or the pursuit of relevant information.

We never tire of pointing out that there is still a long way to go, but it is equally true that steps are gradually being taken to promote this responsible use we advocate. At the end of May, we reported that the Panhellenic Federation of Journalists’ Unions had launched the first ethical code to regulate AI. Now, we highlight the entry into force, in early June, of the new ethics code for journalists in Italy, which, for the first time, includes principles and rules regarding the use of AI in journalistic work.

The document not only updates and simplifies the rules that journalists must follow, but it also contextualises them in the digital age, emphasising the responsibility involved in using advanced tools, such as AI.

As Italian journalist Alberto Puliafito explains in an article published in The Fix at the end of April, the newly enforced code introduces Article 19, which sets out three clear principles:

  • AI cannot replace journalism: the human act of journalism is irreplaceable, no matter how advanced the technology.
  • Transparency is mandatory: journalists must explicitly state when and how AI has been used, and remain fully responsible for the content.
  • Ethical obligations remain: the use of AI does not exempt anyone from verifying facts, checking sources, or adhering to professional duties.

Puliafito views these principles positively but warns that “the real challenge lies in how these rules will be interpreted and by whom.” He adds that he has identified “several grey areas”, including the fact that Article 19 places the burden entirely on individual journalists. “Decisions regarding the integration of AI—from editorial automation to audience-facing chatbots—are made by publishers and newsroom leaders. Without institutional accountability, this rule risks becoming a disciplinary trap for freelance and staff journalists, rather than a safeguard for journalistic integrity,” he says.

To clarify some of these concerns, Puliafito interviews Gianluca Amadori, a councillor of the Italian Order of Journalists, in the same article, an interview we encourage readers to explore thoroughly.